Elige la cortina ideal para tu departamento

Vestir las ventanas de un departamento es una tarea sencilla a la que muchas veces damos menos importancia de la que deberíamos. Sin embargo, las cortinas o persianas son tan importantes como el tipo de azulejo o la iluminación del lugar que habitarás o rentarás para que alguien más lo habite. No te agobies, si bien es cierto que el mundo de las cortinas es inmenso, siguiendo estas recomendaciones podrás elegir las que mejor van con tu departamento y con tu estilo de vida.

  1. Identifica la función de tus cortinas. Según el espacio, define qué es lo que se necesita: que filtren el paso de la luz, que den privacidad al interior, que armonicen con la decoración o que permitan que se vea el exterior. Quizá elijas más de una de estas opciones, sin embargo hay que identificar cuál de ellas es la más importante y partir de ahí.
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2. Elije el tipo. Ya que sabes para qué las necesitas, platica con el proveedor para que te muestre cuáles son las opciones funcionales y estéticas que puede ofrecerte con base en tus necesidades. Los tipos de cortinas que te encontrarás en el mercado son, principalmente:

a. Barrales. Es la más clásica y conocida; muy fácil de instalar y, por ende, de dar mantenimiento. Es ideal para realzar la decoración de un espacio, sin embargo puede no ser la opción si de privacidad se trata. Si te gusta lo clásico pero quieres privacidad, intenta combinar esta cortina con una persiana; hay algunas opciones que te permiten hacerlo utilizando un mismo cabezal como algunas de Hunter Douglas.

b. De riel. Las cortinas se sujetan a unas guías que se deslizan por un riel, ya sea metálico o de plástico, aunque evidentemente los metálicos son mejores. Este sistema se usa sobre todo cuando no hay suficiente espacio entre la ventana y el techo para colocar un barral.

c. Con tensores. Sistema muy sencillo, apto solamente para cortinas muy livianas y de corta vida. No se recomienda para espacios que son frecuentados por niños o mascotas, pues puede caerse con facilidad.

d. Romanas. Con este sistema las cortinas de tela se pliegan verticalmente a manera de acordeón.

Ideales para espacios reducidos, estas cortinas tienen un rodillo que gira en la parte superior, con el cual se puede enrollar o desenrollar la cortina y que además puede ser motorizado. Su mantenimiento es muy sencillo y tienen una larga durabilidad.

3. Elije la tela. No tanto el color sino el tipo de tela según lo que necesitas en cada espacio.

a. Habitaciones con pocas horas de sol prefieren cortinas ligeras que permitan el paso de luz y que al mismo tiempo te den privacidad.

b. Habitaciones con mucha luz solar necesitan cortinas más gruesas para que no entre demasiado calor en verano; al mismo tiempo, ayudarán a preservar mejor tus muebles. Lo más moderno para estos casos son las blackout, pues impiden por completo el paso de luz y su mantenimiento es muy sencillo.

c. Hay espacios cuya luminosidad varía mucho, para ellos puedes combinar una persiana con una cortina ligera, hay algunos proveedores que ofrecen esta opción.

 

4. Colores.

a. Los colores oscuros dan la sensación de un espacio más reducido, mientras que los tonos claros los hacen más amplios. Como guía, toma en cuenta el resto de la decoración para elegir los colores y tonos que mejor van a vestir tus ventanas

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