Comprar un inmueble, desde su elección hasta firmar las escrituras, no es un proceso fácil, sin embargo –además de que valdrá la pena– si tienes una idea básica y te asesoras, el proceso se vuelve eficiente, cómodo y seguro.
Ésta probablemente será una de las decisiones más importantes de tu vida; al menos en el ámbito económico. Con esa idea en mente es que te proporcionamos algunos consejos básicos qué debes tomar en cuenta si estás pensando en adquirir una casa o departamento.
Lo más recomendable es que te contactes con un notario antes de empezar con cualquier trámite, pide su opinión y entrégale toda la documentación de la propiedad que quieras adquirir. Sin embargo, no está de más adelantar un poco el proceso y revisar algunos documentos para detectar si es que existe alguna anomalía.
Solicita al vendedor copia de las escrituras del inmueble, su identificación oficial y acta de matrimonio –en caso de que esté casado o casada– y los últimos pagos de agua y predial. Una vez que los tengas corrobora los siguientes aspectos: la ubicación, asegúrate de que la propiedad esté ubicada donde la escritura lo menciona; el nombre del propietario, solamente esa persona será la que pueda llevar a cabo la venta del inmueble; y, si el dueño está o estuvo casado bajo el régimen de sociedad conyugal es imperativo contar con el consentimiento del cónyuge para poder llevar a cabo la compraventa.
Otros aspectos que debes revisar son los permisos y planos: las construcciones tienen planos arquitectónicos y de instalación, licencia de construcción y aviso de término de la obra. Estos documentos deben de coincidir con la realidad. Por ejemplo, si el papel dice que el edificio tiene cuatro pisos y en realidad tiene tres, es una anomalía y se recomienda consultar con un abogado antes de continuar con el proceso.
También es importante verificar que el inmueble no tenga adeudos. Aunque finalmente el notario con el que acudas hará la misma labor, se recomienda detectar posibles contratiempos antes de que el proceso esté muy avanzado. Por eso mismo checa que el pago del predial esté al corriente y que no se tengan adeudos por créditos hipotecarios.
Una vez que ya estés seguro de que todo está en regla, es hora de elaborar el contrato de compraventa. Lo que expresa este documento es el consentimiento de ambos para realizar la transacción. Debe incluir la calle, número, colonia, superficie de terreno y construcción, cajón de estacionamiento del inmueble por adquirir y las características técnicas a detalle. También contiene el precio total del inmueble, la forma de pago, los montos de penalización en caso de incumplimiento de cualquiera de las partes y la fecha de entrega.
Luego se acude con un notario y se le entrega la escritura previa, las boletas de predial y agua de los últimos cinco años y el acta de matrimonio del vendedor en caso necesario. Junto con los documentos se entrega un anticipo para cubrir algunas gestiones y documentos necesarios para el trámite.
Finalmente tú y el vendedor se presentan a las oficinas notariales para firmar las nuevas escrituras, se liquida la propiedad y listo, ¡a estrena tu nueva casa!